Por Fausto Triana
Madrid, 28 feb (Prensa Latina) Puede que los títulos sean esquivos a uno de los dos clubes, pero el morbo de los Clásicos es único y tres de seguidilla, un enorme regalo para el fútbol de España.
En realidad, todo un disfrute mundial. Pocas veces se encarrilan tres partidos consecutivos entre el Real Madrid y el Barcelona y si bien el protagonismo y las estrellas se acompañan con interrogantes, el espectáculo merece la pena.
Sucederá a partir de esta semana, del jueves 2 de marzo, en el partido de ida de las semifinales de la Copa del Rey en el Santiago Bernabéu, luego con otro duelo en LaLiga Santander el 19 de marzo en el Camp Nou y, finalmente, el 5 de abril en la vuelta en el mismo escenario catalán.
Muchas sensaciones y pronósticos complicados. De inicio, este jueves no estarán en la plantilla azulgrana el delantero polaco Robert Lewandowski, el volante de creación Pedri y el extremo francés Ousmane Dembelé, todos lesionados.
Malas noticias para el técnico Xavi Hernández tras la eliminación de su equipo en la Europa League a manos del Manchester United (1-2) y un revés totalmente inesperado ante el Almería (0-1) cuando se suponía que los culés asegurarían virtualmente el cetro de LaLiga.
Enfrente, unos merengues extremadamente exigidos por el calendario. Con las bajas seguras del austriaco David Alaba y el francés Ferland Mendy, y muchas dudas con el brasileño Rodrygo Goes, la permanencia en Champions League es un arma de doble filo.
La «casa blanca» dejó prácticamente resuelta la clasificación hacia cuartos de final en la máxima competición europea de clubes, al batir al Liverpool en su casa 2-5. Luego sufrió in extremis con un empate a un gol en el derbi contra el Atlético de Madrid.
No está el Balón de Oro del pasado año, el francés Karim Benzema, en su forma óptima y todo el peso ofensivo del conjunto recae en el explosivo atacante brasileño Vinicius Junior. Aun con las ausencias, el Barcelona es el equipo más sólido en defensa del torneo nacional.
El entrenador Carlo Ancelotti deberá buscar alternativas de cara a puerta con Marco Asensio y el uruguayo Fede Valverde, pero no tiene más efectivos confiables, salvo la apuesta arriesgada del jovencito Alvaro Rodríguez, de 18 años.
Alvaro hizo el gol del empate ante el Atleti y anteriormente dio una asistencia contra el Elche. Uruguayo de la cantera merengue, parece tener asegurado un puesto en el equipo grande.